Todo necesita un primer paso o un primer empujón para empezar. A veces más fácil, a veces más difícil. Pero una vez tienes la intención, no puedes dar marcha atrás porque supondría empezar de cero. Y hacia atrás sólo para coger impulso. O ni eso. Es complicado seguir la misma dirección siempre, y no nos engañemos, a veces resulta monótono. Pero vida sólo hay una, y cada minuto es irrepetible, una vez pasa, ya no vuelve. Pero eso no es motivo ni mucho menos excusa para no equivocarse. Por ello, hasta el más mínimo error debe disfrutarse porque, nunca se vuelve a repetir exactamente igual. Hay que pasar por toda clase de sentimientos y situaciones, que no siempre son agradables. Pero, ¿qué sería de los buenos momentos? No tendríamos con qué compararlos o razón para valorarlos. En conclusión, todo, absolutamente todo lo que pasó, pasamos y nos queda por pasar es imprescindible para llegar a donde queremos y a ser quienes somos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario